8.10.12

Autocrítica por favor


“De nada sirve creerse escritor si no se piensa equiparar a los grandes de la literatura, para no ahondar en problemas y subjetividades, si usted se dice amante de la literatura, piense en 10 autores que le gusten. Ahora si se cree escritor, piense que lo que va a hacer tiene que ser de menos aceptable a su propio gusto, es decir equiparable el trabajo de esos 10 que mencionó.
De otro modo, lo que hace es irrelevante; eso sí, si usted dice que antes de ser autor literario se cree escritor desbocado, adelante, los blogs y redes sociales no sufren de sobrepoblación.
Con cariñito ^w^”

Escribí esto hace unas horas en el muro de mi cuenta en Facebook.
Naturalmente no faltaron, y es porque conozco a varios, que se vieron identificados y si bien el punto de esta entrada no es hablar de ello, sino de mí la razón de ese comentario.
Una crítica llamó mi atención, una que decía que lo que uno lee no necesariamente tiene que verse reflejado en lo que uno escribe.  Concuerdo por completo con ese comentario, no obstante mi intención no era esa, mi intención era la de hablar sobre la calidad de lo que se escribe.
Un amigo, muy querido mío, prepara incesantemente un ensayo de sus filosofías, las cuales he apreciado por lo sencilla y bien trabajadas que tiene. Su ideal es alcanzar un punto de vista que ayude a otros a ser más felices, y espero que esto no suene como si mi amigo quisiera escribir un libro de autoayuda, en mi caso creo que busca crear una obra de referencia y reflexión como otros filósofos han hecho. Yo quiero remarcar que a este amigo mío lo considero un filosofo, aunque sea médico de profesión y durante una temporada se haya visto trabajando casos psiquiátricos, pero al final desistió de todo esto y decidió separar la profesión de la pasión. Y en efecto la pasión filosófica de mi amigo, califica como tal dado que sin ser estudiante de filosofía, ha dedicado una buena parte de su tiempo a la lectura, comprensión y meditación de varios clásicos que no faltan en ningún plan de estudios decente en lo que refiere a la enseñanza filosófica.  Por si fuera poco se ha cultivado leyendo algunos clásicos de la literatura y algunas otras tonterías.
En lo particular, su historia me pone a pensar, sobre lo mucho que se puede lograr con voluntad, porque además de todo esto, este amigo gusta de ejecutar música en la guitarra y de ir al gimnasio a esculpir su cuerpo; es un admirable creyente de que el ser implica belleza en el espíritu, la mente y el cuerpo. Un ejemplo diría yo, que también creo lo mismo, pero que en mis años sólo he acumulado resultados mediocres y cuestionables a este respecto.
Aunque, el punto real de esta entrada de blog como iba diciendo es que sucede, que este amigo mío, tuvo la gracia o chiste, o idea, de sugerirme que escriba un libro.
Y esa es la razón  de todo esto, y no es que no me guste escribir, como espero ya haya notado el lector, pero una cosa es escribir notas y hasta unos modestos ensayos y otra muy distinta hacer un libro, peor aún cuando me imagino el ego que debe de tener alguien para escribir un libro con sus ideas o sus historias; quizás hasta una novelilla de esas que ganan premios y que la verdad no leo, porque precisamente estoy muy ocupado leyendo a los clásicos.
Comento también esto porque mi amigo que aunque aún no termina de refinar sus argumentos, ya cuece la idea de escribir un libro, me lo comenta como si fuera el paso natural de todo individuo resuelto en parte, a la introspección y la filosofía propia. Y honestamente es esa presunción la que me aterra, considerarme lo suficientemente relevante como para poner por escrito algo y hacerme responsable de la paternidad de ese escrito.
Honestamente ¿Quién quiere hijos feos?
Más en una cuestión tan estética como es la literatura. Pero parece que a muchos egocéntricos les da por creerse dignos de escupir sus argumentos, lanzar sus ideas y sus personajes. Todo esto como si en por lo menos 300 años de libros no se hubiera abordado algo semejante o que sea superable.
¿Para qué quiero releer un tributo a viejos libros, si no  vamos de menos a igualar su esencia?
Sé muy bien que Borges dice que los clásicos son una casualidad del gusto de unos pocos hombres no muy lúcidos. Pero se han convertido en una referencia y canon, de menos aproximada a lo loable en cuanto a creación humana.
Por otro lado, si lo pensamos en un sentido de esencialidad. Se pueden agrupar los tipos de historias, los ensayos, los dramas, los giros y todo ello que apreciamos en una lista sosa con repeticiones, al abordar el uso de etiquetas y no considerar como sui generis cada obra. Y aún así, lo que apreciamos de la suma de obras escritas, es su individualidad: el matiz, la intensidad y el estilo que en cada una burbujea con vida propia, o de menos lo aparenta.
Apreciamos lo nuevo y nuestro reflejo en las palabras de los “grandes”.
Entonces uno puede argumentar que toda la experiencia literaria es válida.
Aún así, encontrarán a mí a un detractor, pues es válido querer derrocar ídolos anquilosados y tótems apolillados, pero hay que sustituirlos por otros, es cuestión de valor. Una obra destacada, aún cuando haya sido sólo escrita para nosotros, recordando de nuevo una frase de Borges, posee una belleza no sólo en su estilo, su forma y contenido, sino en su construcción. Es la construcción y el acabado lo que denota a una persona que se ha refinado en un arte. En el caso de las construcciones literarias, hay gente que sólo ha escrito, con algo de soltura, imaginación  y hasta talento, pero eso es algo que hasta cierto punto cualquier emprendedor y entusiasta puede lograr.
Una obra acabada produce una sensación de estasis, de verdadero gozo, brillo y gusto.
Por eso cuando leo y releo a mis favoritos, no puedo pensar otra cosa, y no tratar de crear algo que no me va a llenar de igual forma. En otras palabras, si pienso escribir un libro espero que valga la pena realmente, y no que sea un monumento a la autosatisfacción y el facilismo indisciplinado.

P.D.
Espero que si un día me atrevo a escribir aquel libro, siga siendo el mismo autocrítico que soy ahora.

-Chars-



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