Las musarañas son un grupo
diverso con cerca de 350 o incluso más, especies.
Pero poco conocidas, porque son mamíferos pequeños, de hecho el mamífero
terrestre más pequeño conocido es una musaraña (Suncus etruscus) que apenas llega a pesar 2 gramos y medir 3
centímetros de largo. Por lo general son animales bastante pequeños, las
especies más grandes pesan poco más de 100 gramos. Se mueven activamente una
gran parte del día, principalmente en senderos entre la hojarasca o en túneles.
No faltan tampoco las que saben bucear. Todo esto para conseguir alimento, pues
son tan pequeñas que el calor de su cuerpo se disipa muy rápido en el medio y
necesitan constantemente reponer esta energía perdida, en algunos casos, bastan
con un par de horas sin comer para que la muerte les acaezca. No sorprende que
su búsqueda exhaustiva, venga seguida de una vida corta, su corazón late alrededor
de 100 veces por minuto -30 más en promedio que nosotros en reposo- y por lo general no viven más de 2 años, en
algunos casos, sólo se reproducen 2 veces en su vida, porque tienen ciclos
anuales, dejando poblaciones completamente integradas por juveniles.
Las musarañas comen técnicamente cualquier bichito que se atraviese en su
camino, entre escarabajos, cucarachas, caracoles, lombrices, larvas, hasta
escorpiones, lagartijas y ratones, no importando que estos lleguen a ser un
poco mayores que ellas. Pues las musarañas son feroces y voraces depredadores
bastante decididas. Dentro de las herramientas que tienen para someter a su
presa, cuentan con una dentición afilada y resistente. De hecho realizan el
cambio de su dentición decidua –o de leche- cuando están gestándose en su
madre, para que al nacer no les tome mucho tiempo poder comer esas presas tan
duras y difíciles. Incluso un grupo, la subfamilia Soricinae, tiene la punta de
sus dientes de un color rojo obscuro y es porque además de esmalte tienen
hierro en sus dientes para hacerlos más resistentes al desgaste.
Otras que no tienen está cualidad han desarrollado veneno, que puede ser mortal
para los ratones.
Si bien las musarañas se desempeñan casi todo el tiempo cazando, son
depredadores olfativos y auditivos –se ha demostrado la presencia de una
especie de sonar rudimentario- más que visuales. También dependen del tacto,
por lo que son muy sensibles no sólo por sus bigotitos, sino por su pelaje
aterciopelado que incluso en la cola, usan para ir tanteando el terreno en
busca de presas.
En México existen 29 especies, algunas recientemente detectadas, por lo que se
desconoce mucho no sólo de su biología sino de su estado de conservación.
Se estima que un 15% de las especies de musarañas están en peligro de
extinción, pese a su alto éxito adaptativo y reproductivo, sobre todo porque
sus demandas de espacio, aunque pequeñas, son excluyentes para con sus congéneres,
compiten mucho por el alimento, además de que los pequeños cambios son para
ellas bastante drásticos, entonces se entiende que su principal amenaza es la
destrucción de su hábitat y en parte porque son tan pequeñas que no sabemos que
existen, y a menos que usted viva en la Australia el Sahara o la Sudamérica, es
muy probable que una musaraña este fervientemente alimentándose de muchos
animalillos que llamamos plagas, justo ahora, cerca y sin que usted lo note.
Fuentes:
The new Encyclopedia of Mammals
Edición por David MacDonald y Sasha Norris
Brown Reference Group, (2006)
Don E. Wilson & DeeAnn M. Reeder (editors).
Mammal Species of the World. A Taxonomic and Geographic Reference (3rd ed)
Johns Hopkins University Press, 2,142 pp. (Available from Johns Hopkins
University Press. (2005)
Los mamíferos silvestres de México
Ceballos y Oliva, Fondo de Cultura Económica (2005)
Mammals
of North America
Roland W Kays and Don E. Wilson, Princeton University Press (2009)
Roland W Kays and Don E. Wilson, Princeton University Press (2009)